MAESTRIA EN PSICOLOGIA JURIDICA Y CRIMINOLOGIA.

martes, 11 de mayo de 2010

POR UNA PROPUESTA DE QUE SE CASTIGUE A LOS JUECES.

Estimada y distinguida Lic. :
Como es natural las primeras gotas de lluvia fortalecen y fertilizan la tierra, así, mis primeros deseos son de que este año sea de felicidad y éxitos en el campo que usted más lo necesite. Por otro lado le agradezco el haber enviado el correo que hoy le contesto relacionado con la reforma que castiga el proceder de los jueces que por alguna razón divina constantemente están fallando en contra de la justicia, quiero entender que esta iniciativa fue enviada con un espíritu de parar la corrupción que todos conocemos y sabemos que existe en los juzgados en la que subsistimos profesionalmente, sin embargo los intereses son tan exageradamente corrosivos para la inteligencia humana que se bifurcan en la creación de otras formulas inoperantes por antonomasia de la historia, que no permiten que la espiritualidad a la que me refiero, llegue si quiera a provocar el escozor deseado para los que fallan, con las huestes del poder y el nepotismo, amparados por el flagelo de la oscuridad de la conciencia, eso sí es ser pobre, pobre de interés porque nuestras instituciones y quienes las representan vuelvan por el camino meridiano de la razón y el actuar. Es irremediable pestilencia el creer que con un órgano calificador pudiera no pervertirse lo que ya en el corazón del abogado y el hombre esta pervertido, desde que se emite el argumento de que posiblemente un abogado al ver contraria una resolución a sus intereses este estaría en la posibilidad de denunciar al juez, desde ahí el hediondo olor a mala intención llega como un golpe de muerte y aceptación a la espiritualidad de la ley que se quiere emitir; como un intento de parar la corrupción que inunda los pasillos del PODER JUDICIAL, pero nadie se atreva a ser diestro y apuntar con índice alguno; por que la razón es propicia para atraer calamidades, el comentario de Fonseca es un comentario rico en senilidad cronológicamente hablando y haciendo un esfuerzo por verlo de manera positiva estaría de acuerdo, si se viera como la oportunidad de dar y de crear tres plazas de trabajo que tanta falta hacen para esos tres desempleados. Nos habla de prestigio y reputación, me supongo que como una resultante de honorabilidad, considerando los secretos a voces de las vidas honorables de los altos funcionarios y más altos, no jueces, que dirigen los destinos de nuestra justicia en Veracruz, ¡aah! Pobreza; esa si es pobreza, pero no de ellos, si no de cada uno de nosotros que seguimos complaciendo sus bienestares como si fuera la clase helénica, la intocable, en complicidad con la románica que ejerce el ejecutivo. Pero sigamos adelante al fin y al cabo este es el tiempo que nos toco vivir.

Sin esperar que mi catarsis la despeine en lo más minino, mi estimada Licenciada, hoy considere que era necesario escribirle esto, porque últimamente he notado que se ha vuelto una mujer estudiosa y pensante. Por otro lado espero si no coincide en lo que pienso en el escrito que antecede, me disculpe semejante locura y disparate.